El nacimiento de dios, se podría decir, esta directamente relacionado con el de la palabra, que con ayuda de la duda, tubo una hija; la pregunta. Cuando el hombre comenzó a cuestionar, necesito alguna forma de explicar esas cuestiones que le aquejaban. Dios nace entonces, como la gran respuesta a lo inexplicable, al menos por un tiempo.
A medida que la historia avanzaba, el hombre comenzó a entregarle cada vez mas atributos a Este, y con esto, Dios comenzó a tomar su verdadera forma, la del poder.
Cuando Dios se hizo conciente de este poder, inicio una etapa en la cual el era el gran salvador. De esta manera tomo su segunda forma; la explicación de todo, se volvió la causa del todo. Así, todo deseo o falencia que era resuelto se atribuyo a El. Luego de esta era vino una tercera transformación, una evolución que lo llevo a ser eregido como el centro del universo por el hombre, nada podría ser explicado ni atribuido a otra cosa que no fuese El, lo que estuviese en su contra seria arrasado. En esta época le entrego el control de la humanidad a su hija/hermana que a su vez formaba parte de si mismo; la Ignorancia, quien reino sobre el mundo hasta que la historia dio un giro, dios metamorfoseo otra vez.
El tomar su nueva forma le llevaría un tiempo, durante el cual durante el cual se mantendría dormido y los hombres intentarían buscar respuestas a sus preguntas alejándolas de dios, y encontrando de esta forma el inicio del sinuoso camino de la verdad. Pero cuando estaba iniciando ese viaje, Dios termino su ultima y mas brutal transformación, ahora seria conocido como Capital, y su nueva religión seria conocida como “El Culto a la Ignorancia”, dándole así el poder absoluto a su hija, quien de a poco acabo con quienes, en algún momento, habían formado parte de su creación, la pregunta y su madre, la duda. Nadie nunca mas se pregunto nada, el humano dejo de lado el camino de la verdad y se transformo en el esclavo sin conciencia del Capital.
A lo largo de la historia, Dios fue cambiando de forma, nombre, lugar de origen, credo; pero nunca pudo esconder su verdadera identidad, la de ser el Poder que desea controlar.
Dios no es una religión, no es un creador, no es un ente superior, es la codicia y el deseo egoísta manifestado en un ser mítico, con una gran fortaleza entregada por la humanidad.
El capital no es mas que eso llevado a una forma física, algo que existe realmente. Dios es ahora materia, es dinero. El gran ídolo bañado en oro, esa es la nueva transformación de Dios.